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Maimónides en la calle Judios de Córdoba |
Moshe ben Maimon nació en Córdoba en el año 1135. Conocido por Maimónides para los cristianos o Rambam (acronimo de las siglas Rav Moshe Ben Maimon) para los judios. Su llegada al mundo fue el inicio de un nuevo amanecer en la historia del pueblo de Israel y de la humanidad. Su pensamiento llegó a influir en personajes tan importantes como Santo Tomas de Aquino, René Descartes o Baruch Spinoza.
Aunque no hay una extensa informacion sobre la familia de Maimónides, se sabe que su padre, Maimon ben Yosef, era rabino y juez de la comunidad judía de Córdoba. Fue un hombre muy respetado entre la comunidad, con una profunda sabiduría y poseedor de refinados modales. Sus orígenes se remontaban a la familia del rey David y ello le cualificaba para estar dentro de los parámetros del mesias biblico. Sus enseñanzas fueron las que establecieron los cimientos sólidos en la construccion del carácter y personalidad de su hijo. Maimonides encontró en su padre su mejor maestro.
Por lado materno sabemos que su madre falleció al darle a luz. Ella era de familia muy humilde y su padre trabajaba como carnicero. No hay muchos más datos sobre la madre biológica de Maimonides, sin embargo sabemos que su padre se volvió a casar con otra mujer cumpliendo con el versículo del Génesis que reza «no es bueno que el hombre esté solo».
Maimónides no tuvo una vida fácil. Cuando tenía trece años, se vió obligado a huir de Córdoba. La secta islámica de los Almohades provenientes del norte de Africa, habían derrocado al régimen de los Almorávides -mucho más tolerantes- y habían forzado a los judíos a convertirse al Islam. Maimónides nunca más regresaría a su Córdoba querida pero guardaría en su corazón el profundo amor hacia España firmando sus escritos como: «Moisés, el sefardí.».
El primer lugar donde se estableció Maimonides al huir de Córdoba fue Almería. Según algunos historiadores coincidió y cobijó allí a Averroes, un erudito islámico cordobés que también se vio obligado a huir del fanatismo almohade. Averroes y Maimónides tuvieron vidas muy parecidas. Ambos huyeron del radicalismo religioso y construyeron una nueva senda en la que razón y fe irian de la mano.
El régimen de los almohades continuó su expansión llegando a Almeria y haciendo que la familia de Maimónides tuviese que huir de nuevo. La ciudad marroquí de Fez acogió a Maimónides cuando tenía 25 años. Durante su vagar errante por Al-Andalus, Maimónides había adquirido conocimientos en el campo de la astronomia, la lógica, las matemáticas y las ciencias naturales, habiendo escrito dos tratados: «el tratado sobre la lógica» y «el tratado sobre el calendario judío».
Maimónides escribió en Fez su famosa «epístola sobre la conversion forzosa».
En ella daba respuesta al escrito de un rabino que defendía y aconsejaba a los judíos que era preferible morir a aceptar la conversión al Islam. Maimónides respondió con claridad y sabiduría argumentando que dicho rabino no había sido capaz de entender la diferencia entre las conversiones realizadas por eleccion propia, de aquellas que eran forzadas. Los judíos en Fez estaban siendo obligados a asistir a las mezquitas, rezar y a reconocer verbalmente a Mahoma como el profeta de Allah. Pese a todo, en el interior de sus casas, los judíos continuaban practicando su fe en cubierto, estudiando la Torá y el Talmud y cumpliendo el mayor número de mandamientos posibles. Los musulmanes sabían de la dificultad de convertir el corazon de los judíos al Islam, pero se bastaban -en un primer momento- con la confesión oral y la apariencia religiosa.
Es importante puntualizar aquí que Maimónides veía al Islam como una religión puramente monoteísta y que en ningún caso se estaba cometiendo «idolatría» al practicar «FORZADAMENTE» la religión mahometana.
La persecucion religiosa en Fez fue «in crescendo» con el tiempo, y Maimónides junto a su familia acabarían huyendo de nuevo, rumbo a Tierra Santa. Allí permanecerían seis meses en la ciudad de Acre para finalmente descender a Alejandría y acabar estableciéndose definitivamente en Fustat, el antiguo el Cairo.
Egipto fue el lugar donde la familia de Maimónides logró compatibilizar las actividades comerciales con las obligaciones religiosas. Su padre Maimón y su hermano David se dedicaban principalmente al comercio de piedras preciosas mientras Maimónides estudiaba y profundizaba en la sabiduría de la Tora y en el terreno de la filosofía. Sin embargo, una vez más la desgracia acometió a Maimónides. En un viaje de negocios, su padre Maimón ben Yosef y su hermano David ben Maimón, perecen. El barco en el que viajaban naufraga, posándose en el fondo del océano índico. Maimónides no es capaz de asumir tanta tragedia y cae gravemente enfermo hasta el punto en que llega a peligrar su vida.
Un año es el tiempo que Maimónides permaneció postrado en cama recuperándose de tan horrible desgracia. La perdida de su padre y su hermano le obligó a profesionalizarse en el campo de la medicina, llegando a ser uno de los mejores médicos de la Edad Media.
Fue médico oficial de la corte del sultán Saladino, y según muchos historiadores Ricardo Corazón de León le ofreció trabajar a su servicio, aunque Maimónides en un gesto de lealtad a Saladino, declinó la oferta.
En el terreno espiritual y filosófico, Maimonides publicó varias obras dignas de elogio. Aquí nombraré las más influyentes: Mishne Torah y Guía de Perplejos.
La Mishne Tora es un libro primordialmente jurídico talmúdico. El libro resume de manera magistral prácticamente todas las disputas rabínicas que se encuentran en el Talmud y clarifica de forma extraordinaria los principios básicos y capitales de la creencia judía. Es una obra fundamental que permite a todo judío sin distincion el acceso y conocimiento a prácticamente toda la ley oral. Con su libro no hay necesidad de acudir a los extensos volúmenes del Talmud ni adentrarse en las profundidades de sus debates. En palabras del propio Maimonides: « todo aquel que lea la Mishne Tora conocerá toda la ley oral y no necesitará otro libro que no sea el mío»
La Mishne Tora fue bastante criticada en un primer momento. La ausencia de las fuentes en las que Maimónides se ampara para clarificar la ley, provocaron grandes críticas de otros rabinos. Sin embargo la Mishne Tora se afianzó con el tiempo y el deseo de Maimónides de allanar las controversias legales se cumplió. Hoy su libro sigue siendo estudio obligado para la mayoria de las comunidades judías del mundo.
Si la Mishne Tora hizo accesible el judaísmo a todos los judíos, será en la Guía de Perplejos dónde Maimonides universalizará la sabiduria de la Tora utilizando como método la filosofía griega. El titulo original de la obra es: «dalalat al hairin». Escrita en árabe fue traducida al hebreo por Samuel Ibn Tibbon con el nombre de «Moré Nebuchim», en español: «Guía de perplejos».
La obra en un principio va dirigida a uno de sus discípulos, Yosef ben Judah ibn Aknin. Él había interiorizado las verdades de la Torá en su corazon pero se encontraba confundido al no poder conjugarlas con las verdades que la razón demandaba a través de la filosofía aristotélica. Las dificultades para entender los antropomorfismos de la Torá, aceptar la creación ex-nihilo del universo o el tema de la providencia divina, serán algunos de los asuntos a tratar en la obra.
Maimónides demuestra que no hay incompatibilidad entre la Torá y las verdades de la lógica. Explica enseñanzas de la Torá utilizando argumentos Aristótelicos. Maimónides rememora y revive el espíritu de Filón de Alejandría enriqueciendo la Tora con las enseñanzas filosóficas griegas. Introducir conceptos de Aristóteles al judaísmo significaba, en cierta manera, universalizar la Torá, o por lo menos hacerla más accesible al entendimiento de todos. Sin embargo Maimónides advierte que su libro va destinado para aquellas personas que han interiorizado las verdades de la Torá pero que se encuentran confundidos frente a las verdades de la ciencia.
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Sepulcro de Maimónides en Jerusalen |
Maimónides falleció el año 1204 en Fustat. Sus restos se trasladaron a Tiberiades, dónde se encuentra su tumba actualmente.
Para el autor de éste texto, es un honor poder elogiar al gran Maimónides y agradece a Tarbut Sefarad y más concretamente a Mario Saban la oportunidad de poder expresar mi admiración por él y trasmitirla a todo lector. No tengo dudas de que Maimónides representó el perfecto equilibrio entre el cumplimiento de la Torá con la vida cotidiana. Saber que trabajó como médico de Saladino, que convivió con musulmanes y cristianos, que tuvo conocimientos de otras ciencias y filosofías y que ello no le impidió en ningún caso la el cumplimiento de la ley de Moisés, nos enseña su concepto universal del judaísmo.
Animo a toda persona, judía o no, a que estudie y lea los libros de Maimónides. El doctor Mario Sabán escribió un libro extraordinario titulado: «Rambam, el genio de Maimónides» donde realiza una excelente explicación de la guía de perplejos y analiza profundamente las controversias existentes en el judaísmo a lo largo de la historia y a raíz de sus escritos.
¡Que el mérito del gran maestro, Moshe ben Maimon, faro de luz para la humanidad, nos proteja y nos guie en todo nuestro andar y que pronto veamos la revelacion del Di-s Único a toda la humanidad, en paz y armonía! Amen.
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