jueves, 23 de marzo de 2017

ILUSTRES CORDOBESES


HISTORIA:

EN BUSCA DE LOS HUESOS PERDIDOS DEL GRAN 

CAPITÁN

En la breve biografía sobre Gonzalo Fernández de Córdoba, se cerraba el texto indicando que puede
Puede visitarse su tumba en el Monasterio San Jerónimo (Granada). 
.visitarse su tumba en el
Monasterio de San Jerónimo en
Granada. Eso no deja de ser cierto,
pero el destino de sus restos tiene su historia y parte de misterio.

FUNERAL.

Murió el 2 de Diciembre de 1515, con 62 años, y sus funerales se realizaron en el antigua convento de San Francisco de Granada. La
Crónica de Alonso de Santa Cruz describe los funerales y como se engalanó el convento para tan grande ocasión con todo lujo de ornamentos, así como  con las banderas y estandartes de los enemigos derrotados:
Convento de San Francisco de Granada.
Murió el Gran Capitán como buen cristiano, en el hábito de Santiago, dejando su ánima encomendada a la Duquesa su mujer. Mandó decir cincuenta mil misas a las ánimas del Purgatoria.

Después de su muerte, lo sentaron en una silla y lo tuvieron así todo el día, para que la gente lo viese. Hubo grande llanto por su muerte, en Granada. así de moros como de cristianos, por todas las calles que había de pasar cuando lo llevaron a enterrar.

Tenía alrededor doce candeleros con cirios muy grandes, y dentro otros doce, que cada uno pesaba quince marcos de plata. La iglesia estaba ricamente adornada de tapicería . Estaban puestos en la reja dos guiones del rey de Francia, el de Ceriñola y el de Garellano, muy ricos, ensangrentados. A la mano derecha estaba una bandera muy rica con las armas de la iglesia, que fue tomada al duque Valentín; y luego otra del príncipe Bisignano, y otras del señor de San Severino. A la mano izquierda  estaba una bandera del rey Federico, y otra del marqués de Mantua, y otra del marqués de Bitonto. Y toda la iglesia emparamentada de banderas y estandartes.

Estuvieron en las honras personas de Sevilla, y caballeros, que se hallaron en aquel tiempo veinte leguas a la redonda. Y todas las religiones y clerecía de todo el confín de Granada. Era tanta la multitud de gente, que no cabía en las calles ni en la iglesia.    
Capilla mayor monasterio san Jerónimo 

TRASLADO

Tras la petición de María Manrique , su viuda, el Emperador Carlos I de España y V de Alemania (nieto de Fernando el Católico) puso enmienda al poco reconocimiento dado por su abuelo a Gonzalo y cedió parte del Monasterio de San Jerónimo para el enterramiento de la familia. Las obras concluyen en 1552, 37 años después de su muerte. Las hazañas del Gran Capitán quedan grabadas en piedra, mezclando figuras religiosas y paganas de la mitología clásica. Destacar las imágenes orantes de él y su esposa a ambos lados del retablo de la Capilla Mayor, donde se encuentran sus sepulcros.

Sus restos son trasladados junto con los de su esposa, hijas y hermanos, con un cortejo formado por multitud de personalidades de todos los ámbitos. Lo abría la Cruz de la Iglesia Mayor, 450 religiosos, clérigos con velas, los Capellanes reales, el Cabildo con tres capillas: la Real, la del Duque y la Mayor, seguidos de los ocho féretros. A continuación desfilaba el anciano caballero Juan Peláez de Berrio, natural de Jaén, que portaba el estoque del Gran Capitán, cuya cruz, manzana y empuñadura eran de oro y plata; honrado así por haber servido en los Tercios del Gran Capitán y ganar gran fama en las guerras de Nápoles. Tras él ondeaban todos los estandartes y, tras ellos, los caballeros de Córdoba y los de Granada. presididos por el Marqués de Cerralbo.

EXPOLIO.

Puente Verde sobre el Río Genil.
Damos ahora un salto de casi tres siglos, hasta la invasión napoleónica. Los soldados franceses entran en Granada el 28 de Enero de 1810. La ciudad es sometida a expolio, y el Monasterio de San Jerónimo resulta muy dañado. Hay varias teorías sobre lo que sucedió con el tesoro histórico y artístico que contenía, pero la mas difundida es que el General francés Honore Sebastiani, conocedor del azote del Gran Capitán sobre sus antepasados, ordenó que se llevaran joyas, rejas, estandartes, la espada (que el papa Alejandro VI entregó al Gran Capitán para la defensa de la Iglesia) y hasta los huesos del mismo. También destruyeron la torre y derribaron parte del campanario para hacer el Puente Verde sobre el río Genil. Utilizan el Monasterio como cuadra y cuartel. El abandono del edificio persiste durante tanto tiempo que el historiador granadino Manuel Gómez-Moreno denuncia en 1884 que es utilizado como cantera de la que se retiran piedras para usarlas en otras construcciones. Afortunadamente, la torre es reconstruida en la década de los 60.

Granada, pero no podemos cantar victoria del todo.

SER O NO SER.

En febrero de 2006 salta la noticia en el diario de Córdoba (reproducida en varias webs y blogs ) sobre un estudio realizado por el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico y que revela que los huesos de San Jerónimo no corresponden con el Gran Capitán. Realizada la consulta al IAPH, me remiten a su boletín  nº 57 (febrero 2006, pp. 58 - 71). El artículo habla de unos restos encontrados tras el altar, y que tras su estudio no se relacionan con Gonzalo ni su familia, lo que no implica que los de la tumba no lo sean. Ojalá se desvele el misterio sobre.....

 
Los huesos de Gonzalo Fernández de Córdoba
que, 
con su gran valor, se apropió el sobrenombre de 
Gran Capitán, 
están confiados a esta sepultura hasta que al
fin
sean restituidos a la luz perpetua .
Su gloria no quedó sepultada con él.

Epitafio de su lapida.


 




  

viernes, 17 de marzo de 2017

PERSONAJES ILUSTRES DE CÓRDOBA

Monumento en recuerdo del Doctor
EMILIO LUQUE.

DOCTOR EMILIO LUQUE MORATA



El 16 de Febrero de 1964 se procedió a la inauguración del busto realizado en bronce sobre un pedestal de piedra en homenaje a uno de los médicos más insignes que la ciudad de Córdoba ha criado.

El doctor Emilio Luque, nació en Córdoba en 1876 y que falleció el 15 de Febrero de 1939, comenzó su trayectoria profesional como médico de la Beneficencia Municipal. Fue fundador de la Academia de Ciencias Médicas de Córdoba, primer presidente del Colegio de Médicos y fundador del Sanatorio La Purísima, primer establecimiento privado de la ciudad. Merced a su dilatada carrera y a su implicación con la sociedad de su tiempo en cuestiones de salud, fue nombrado Hijo Predilecto en 1930.

Con motivo del 25 aniversario de su fallecimiento, se descubrió este conjunto escultórico, obra de Amadeo Ruiz Olmo y llevado a cabo por suscripción popular. El alcalde de Córdoba Antonio Guzmán Reina, descubrió a los congregados en la plaza dedicada al doctor, la escultura en homenaje a este pionero de la sanidad moderna en Córdoba. Médico creador de la escuela de Cirugía cordobesa. Ricardo Molina se refiere a este enclave en los siguientes términos: "La plaza del Doctor Emilio Luque, es como fresco patio cordobés ofrecido en el corazón de la Córdoba, ya que no moderna, modernizada. Su función sedante y andaluza la torna grata escala de árboles y flores, al borde de las arterias palpitantes de rumor y de actividad urbanos."

La plaza que hoy lleva su nombre, con anterioridad era la Plaza del horno de San Juan

 Del
Archivo Municipal de Córdoba.

sábado, 4 de marzo de 2017

LA VIDA EN CÓRDOBA LOS AÑOS 30/70

Una de las cuevas vivienda.
SOBRE LAS CUEVAS VIVIENDA DE LA CORNISA NORTE DEL PARQUE DE LA ASOMADILLA Y OTRAS.


Cuando las dificultades de la posguerra generaron el éxodo del campo a las poblaciones, cuando las persecuciones de las personas, represaliadas de guerra, hicieron que estas y sus familias huyeran de sus pueblos, de pocos habitantes, en los que además de convivir con los fascistas, o los republicanos, tenían que soportar sus humillaciones de unos y otros, esas personas huidas de sus lugares de origen tuvieron que acomodarse a lo que sea, en el destino.Si en tiempos de anacoretas, por gusto, algunos para encontrar a su Dios vivían en aislamiento ( es un decir), pues no dibuja Giovanni Boccaccio ese panorama en su Decamerón. en estos casos por el contrario, eran los "alojamientos" de suma necesidad.
En nuestra ciudad hubo personas que utilizaron ese modo de vivir. me estoy acordando de los abuelos de Pilar, una buena persona y mejor fotógrafa, y las cuevas de la Arruzafa, además de las que citaré
Otra cueva y su entrada.
después, de la cornisa norte de la azomadilla, junto a la Huerta del Naranjo; las de al lado del canal (ahora es un jardín) frente al Punto Verde de la Fuente de la Salud y el sombrerillo del Rey que aún queda allí. estas desaparecidas entre un precioso jardín que salva el desnivel (lo he subido y se las trae), entre la carretera y la preciosa barriada superior.

Subida al jardín citado
Plano alrededores de Mirabuenos, canal y antigua vía del  ferrocarril.
O algunas en la Palomera; sin olvidar el barrio de chabolas que fue el Zumbacón; o el barrio del  Naranjo, poblados que surgieron como núcleos de personas desplazadas que se hicieron un chozo y después se consolidó. O sin ir mas lejos el barrio de Villa cachonda, en el barrio Viejo del Campo de la Verdad. O incluso el cementerio de los protestantes de Duncan Shaw, en el que vivieron personas junto a las tumbas. o los puentes del canal como el que ocupaba la familia Carrasco "Marchena el de la Arena" recién emigrado de Linares. O el del canal del sifón  de Pedroches que también tenía un "apartamento" en uno de sus ojos. O la ocupación de los bordes de las cañadas reales, caso Villarrubia, Higuerón et    

Puente vivienda de la familia Carrasco
Enumerar todos esos lugares del mal vivir, por imperiosa necesidad, de las familias. sería interminable. El otro día tomando un respiro junto a los almezos de la noria de la desaparecida Huerta del Naranjo, entablamos conversación con un lugareño, algo mayor, que conocía el terreno por haber nacido en un chozo que se hizo su padre en el barrio,  que gracias al primer ayuntamiento democrático de esta ciudad y a la conciencia del partido que lo gobernaba, fue adquiriendo dignidad, toda la que se merecían su habitantes. Adoquinado de calles, alcantarillado, que se acababa toda la porquería corriendo por ellas, como si de un poblado de la oscura edad media se tratara, y otras muchas mejoras sociales. La pena es que hoy no nos acordamos de la transformación del barrio del Naranjo, de sus fuentes, servicios públicos etc. para poder ser hoy un barrio que está rodeado de otros residenciales, el colofon es el maravilloso Parque de la Asomadilla y sus aledaños, gracias al sacrificio y la lucha de muchos ciudadanos que al   fin has visto realizada su obra, que no es de los poderes públicos, sino de ellos. El encausamiento del Arroyo de las Piedras, aunque la sinvergonzonería de unos cuantos, hayan ocupado su cause, un gimnasio y
jardines de un par de chalet, y mas abajo la fabrica del plomo además de las perreras y cuadras, y una empresa de ascensores. No podemos olvidar el cementerio de coches de la guerra civil, en el cuartel de Automovilismo "se llamaba de San Fernando,pero seguro que nadie lo mencionaba así" , que había en lo que hoy es la glorieta de los Almogávares. Allí también vivían personas en los coches cuando se relajó la vigilancia del lugar. Ese lugar parecía sacado de un tebeo de Hazañas Bélicas, era lo mas cerca que habíamos estado los niños del material de guerra. Fue la primera vez que vi el cementerio de materiales de guerra, desde una fiesta que había en una casa de vecinos que hacia esquina y se cantaba canciones del momento la guaracha "María Cristina me quiere gobernar" y la "Raspa".

Conocí un vecino que en esas cuevas de la cornisa norte de la Asomadilla, sobre el cauce entonces abierto del Arroyo de las Piedras, y frente de la noria de la Huerta del Naranjo, vivían no menos de seis familias, y muchos niños. El Agua potable más cercana, la fuente de la Salud, o un pilar arriba del barrio, y ya más lejos a la alcubilla de la palomera. Todavía se observan las alacenas excavadas  
Antigua puerta cementerio protestante Dunca Shaw
 en las paredes de la cueva, e incluso los restos de hollín en sus techos, aunque estos parecen de recientes ocupaciones. Ahora están cercadas por una valla caída y rodeadas de restos de porquería de furtivos amantes o usuarios , al amparo de las cañas que se alimentan de la humedad del arroyo subterráneo.

Viviendas chozos en el interior de cementerio.
Conocí también un hecho vecinal de ese tiempo, ocurrido con la persona que por allí vivía que la llamaban Juana la Fea - supongo no sería por gusto-, cuando la Guardia Civil intentó detenerla no sé por que razón, pero tampoco en ese tiempo era necesario tener alguna, y en el forcejeo con los beneméritos tiró a uno de ellos al arroyo, huyendo como alma que lleva el diablo. Luego se comentó que se había marchado en el tren, en una casetilla de los guardafrenos de un vagón de mercancías a Cataluña con su compañero. Era muy normal eso que se llamaba viajar en los "topes". Hablamos del Cortijo Fuente de la Salud, Mirabuenos y Sansueña, aunque no estaba muy al tanto de la usurpación del dominio hidráulico por parte de los "vivos usurpadores " y además nos dio la impresión que pretendía disculparlos.
Acceso a la cornisa







                                 






       
Puerta del cuartel Automovilismo

Ojo seco del puente de Pedroches.












Otra cueva con restos de hollín. 







NOTAS CORDOBESAS . BLOGSPOT.COM
PUBLICADO POR  PACO MUÑOZ
WIQUIPEDIA CORDOBA.